La historia perdida de la animación: arcos cancelados de ‘The Clone Wars’

La animación de Star Wars está de vuelta. Esta semana ha salido a la luz Tales of the Jedi, una antología de cortos de animación protagonizada por dos personajes icónicos de la saga: Ahsoka Tano y Dooku. Su estilo de animación, la trama de sus capítulos, y los personajes que la conforman, le confieren un aura reminiscente a The Clone Wars. Y no es para menos, dado que detrás de ella anda Dave Filoni, el creador de dicha serie. Sólo con ver sus seis cortos, queda claro que el animador ha aprovechado la antología para narrar historias que, por un motivo u otro, no pudo desarrollar en ella y que, de algún modo, la complementan.

Tales of the Jedi

Precisamente el tema a tratar en este artículo son las historias de The Clone Wars que no tuvieron la fortuna de salir a la luz. Tras cinco temporadas en emisión, el 11 de marzo de 2013 la web oficial de Star Wars anunciaba su cancelación debido al nuevo rumbo tomado por la franquicia tras la compra de Disney. La serie tenía planes para seguir adelante al menos 2 temporadas más, pero ante esta noticia se decidió darle un cierre digno con una sexta temporada de tan sólo 13 capítulos bajo el nombre de Las misiones perdidas.

Según reveló Dave Filoni en la Star Wars Celebration de 2015, por aquel entonces se descartaron al menos unos 11 arcos completamente escritos, algunos de ellos total o parcialmente animados y doblados. Más tarde algunas historias fueron adaptadas a otros medios a través del proyecto The Clone Wars Legacy, otras fueron rescatadas en la séptima temporada posteriormente anunciada, y varias ideas y modelados fueron reutilizados en Star Wars: Rebels. Sin embargo, gran cantidad de contenido ha quedado en olvido más allá de algún guiño esporádico. Hoy, lo recordamos.

The Bad Batch

La Remesa Mala ha sido la gran beneficiada de la purga. En el momento de la cancelación de la serie, este arco estaba totalmente animado (animación proxy) y doblado. De hecho, en 2015 fue publicado al completo en YouTube como parte del proyecto The Clone Wars Legacy. Algunas ideas que vemos en este arco fueron rescatadas en productos posteriores; la base de la República en Anaxes apareció en Rebels y la serie de cómics Star Wars (2015) presenta a la Fuerza Operativa 99, una unidad imperial inspirada en nuestros clones defectuosos favoritos.

Originalmente, el Merodeador tenía un retrato de la senadora Amidala en el casco, lo cual a Anakin no le hacía mucha gracia. La frase escrita en aurebesh dice «es bueno ser malo».

El arco fue recuperado en la séptima temporada de The Clone Wars, y más tarde sus protagonistas gozarían de su propia serie de animación con The Bad Batch. No hay mucha diferencia entre el arco planeado en un primer momento y el que finalmente vio la luz, salvo por pequeños detalles. El mismo sirve como presentación de la Fuerza Clon 99, un grupo de clones comando con modificaciones deseables que debe su nombre al mítico 99. Su trama consiste en el rescate de Echo de manos de los separatistas, quien finalmente se acabaría uniendo a la mencionada unidad.

Rex libera a Echo de su cautiverio.

Como curiosidad, según reveló Filoni en el panel dedicado a dicho arco en la Star Wars Celebration de 2015, la Fuerza Clon 99 fue concebida por el mismísimo George Lucas. Por otro lado, también confesó haber reintroducido a Echo, tras su aparente muerte en Lola Sayu, debido al cariño que recibió el personaje por parte de la audiencia.

La crisis del cristal en Utapau

De la misma forma que el arco anterior, el de Utapau estaba totalmente animado y doblado, y fue publicado al completo en YouTube como parte de The Clone Wars Legacy. Según reveló Pablo Hidalgo en el video explicativo de dicho proyecto, esta historia y las demás incluidas en él son consideradas canon.

Anakin y Obi-Wan en el metraje revelado.

En él, Obi-Wan y Anakin viajan a Utapau para investigar la muerte la maestra Tu-Anh, una Jedi rebelde que acudió al planeta por un asunto desconocido. Como más tarde acabarían descubriendo, Tu-Anh andaba detrás de una conspiración en la cual estaban implicados el gobierno del planeta, los separatistas, los Amani (una especie primitiva emigrada a Utapau, asentada en las llanuras y los niveles inferiores), y los Sugi, unos traficantes de armas. Y no de simples blasters o explosivos, pues en el marco de este complot los Sugi pretendían vender al General Grievous un cristal kyber masivo, destinado a la Estrella de la Muerte.

Concept art oficial del cristal kyber usado en el arco.

En este arco, podíamos ver a un Anakin coqueteando cada vez más con el lado oscuro y profundamente dolido con la marcha de Ahsoka de la Orden Jedi. La relación entre el Héroe sin miedo y su antiguo maestro seguía la dinámica de las temporadas anteriores, y además nos dejaba varios diálogos más que interesantes:

–  Anakin, lamentarte por la decisión de Ahsoka no la traerá de vuelta.

+ La echo de menos, ¿de acuerdo? ¿Era eso lo que querías que dijera? Aún no puedo entender cómo pudo abandonar la orden.

Obi-Wan y Anakin

Durante el último capítulo del arco tenía lugar una reunión del Consejo Jedi en la cual iban a aparecer Depa Bilaba y Oppo Rancisis, sus dos únicos miembros que aparecieron en la serie. El diseño de la maestra fue reutilizado en el primer capítulo de The Bad Batch. También llama la atención que la región de Utapau visitada por Anakin y Obi-Wan en este arco se caracteriza por unas amplias llanuras y montañas cuyo diseño está inspirado en un arte conceptual de Ralph McQuarrie para El Retorno del Jedi. Además, este modelado más tarde sería reutilizado como el paisaje de Lothal en Rebels. Además, las ideas planteadas acerca del cristal kyber masivo y su funcionamiento fueron retomadas más tarde en la novela Catalizador y en la cuarta temporada de la serie mencionada.

Comparativa entre el diseño de Utapau en el arco cancelado y el de Lothal en «Rebels».

Hijo de Dathomir

Este arco iba a retomar la historia de Maul justo después de caer en las garras de Sidious, enlazando con el del Asedio de Mandalore. En mayo de 2014, fue adaptado en la serie de cómics Darth Maul: Hijo de Dathomir, como parte del proyecto The Clone Wars Legacy. Curiosamente, se trata del único producto escrito de Legends que se mantuvo en el canon tras el reinicio de la continuidad.

Maul capturó a Dooku en un intento de atraerlo en su lucha contra Sidious, pero se vio obligado a liberarlo cuando los Jedi descubrieron su base («Darth Maul – Son of Dathomir #3»)

Tras ser capturado y encarcelado en Stygeon Prime, Maul fue rescatado por la Guardia de la Muerte. En su huida se puso en contacto con la Madre Talzin, con quien ideó un plan para vengarse de Sidious de una vez por todas. Sin embargo, pese a llegar a capturar a Dooku y a Grievous, sus planes fueron frustrados por los Jedi, de forma que las diferencias entre la Hermana de la Noche y los Sith tuvieron que resolverse en un enfrentamiento final en Dathomir. Si quieres conocer más detalles sobre su trama no te pierdas nuestro artículo dedicado al Sable Oscuro.

El arco original iba a tener algo más de contenido del que se rescató en el cómic. Según reveló Filoni en la Star Wars Celebration de 2015, una de sus escenas iba a mostrar a los Jedi explorando los restos de la Batalla de Ord Mantel. Varios detalles, incluyendo personajes como Gar Saxon o Rook Kast, fueron introducidos posteriormente en Rebels y en la séptima temporada de The Clone Wars.

Gar Saxon en «Darth Maul: Hijo de Dathomir #1».

Discípulo Oscuro

El arco de Discípulo Oscuro iba a estar protagonizado por Quinlan Vos y Asajj Ventres, culminando la historia de la Dathomiriana. Originalmente, iba a convertirse en el más largo de toda la serie, abarcando un total de 8 capítulos. En mayo 2015, su historia fue adaptada en la novela homónima.

Concept art de Quinlan Vos y Asajj Ventres para el arco cancelado.

Tras 3 años de guerra, el Consejo Jedi tomó la cuestionable decisión de asesinar al Conde Dooku en pos de acabar de forma rápida con el derramamiento de sangre. Para ello, el mejor cualificado era Quinlan Vos, un Jedi experto en el inframundo y en misiones de espionaje. Y que mejor aliado en su cruzada que Asajj Ventress, antigua aprendiz del Lord Sith con hambrienta de venganza. Tras ganarse su confianza, Vos consiguió su ayuda para infiltrarse en las filas del líder separatista. Sin embargo, antes le esperaba una exigente preparación, durante la cual ambos desarrollaron un fuerte vínculo que evolucionó a una historia de amor tan preciosa como trágica.

Cuando se conocieron, Ventress le propinó un puñetazo a Vos después de que este le llamase «cariño».

Obi-Wan y Anakin iban a tener una presencia muy relevante en la historia, especialmente Kenobi debido a su amistad con Vos. Además, en el arco también aparecían los miembros del Garra de Krayt, contratados por Ventress para entretener a Dooku.

El diseño de Ventress iba a ser bastante diferente al visto anteriormente en la serie como símbolo de su evolución. Por otro lado, Vos iba a presentar un aspecto mucho más similar al de Star Wars: Republic. De hecho, su papel iba a ser muy similar al que tomó en dicha serie de cómics: intentar asesinar al Conde Dooku, caída al lado oscuro debido a su obsesión por desenmascarar al maestro Sith, y redención. Sin embargo, hay que decir que lo ocurrido en el arco iba a romper drásticamente con su trasfondo en el Universo Expandido.

Quinlan Vos y su pareja en el Universo Expandido, Khaleen Hentz, en «Star Wars: Republic #76».

Cad Bane y Boba Fett

En la Star Wars Celebration de 2015 Filoni reveló que las temporadas canceladas incluían un arco centrado exclusivamente en los cazarrecompensas. En concreto en dos auténticas leyendas del negocio: Cad Bane y Boba Fett. Estos episodios iban a tener lugar principalmente en Tatooine y su trama estaba inspirada en la película The Searchers.

En el arco, Bane y Fett formaban equipo para rescatar a un niño capturado por los Tusken. Tal y como muestra el metraje publicado en 2015, el plan del Duros consistía en que el joven clon de Jango Fett se dejase capturar por los Tusken en una emboscada y así encontrar su campamento gracias al localizador de su armadura.

El diseño de Bane en el arco cancelado es el mismo que vemos posteriormente en «The Bad Batch». También usaba la misma nave, el Justificador.

Durante su juventud, Bane aprendió el oficio de parte de Jango Fett y con los años ambos acabaron desarrollando una gran rivalidad como los dos maestros del negocio. Llegado un punto, el Duros quiso batirse en duelo con el mandaloriano en pos de discernir quien era el mejor. Sin embargo, nunca pudo hacerlo debido a la muerte de Fett a manos de Windu. Con Boba tenía una segunda oportunidad. El joven era una réplica perfecta de su padre, con lo cual Bane pensó que, si lo instruía, tendría el potencial de alcanzar su nivel y así él podría disfrutar de su ansiado enfrentamiento.

Y tal y como mostró Filoni en un clip revelado en la Star Wars Celebration de 2017, la oportunidad de Bane llegaba en este arco. Ambos se batían en un duelo a muerte al más puro estilo western del cual eran testigos otros cazarrecompensas como Bossk, Embo, Seripas y C-21 Highsinger. Como resultado del enfrentamiento, Bane recibía un disparo en la cabeza que presumiblemente acababa con su vida; Boba recibía otro, el cual causaba la mítica abolladura de su casco.

Solo el Beskar salvó a Boba Fett de la infalible puntería de Cad Bane.

Al nunca haber llegado a emitirse en la serie, oficialmente este duelo no es canon. Sin embargo, la posterior aparición de Bane en The Bad Batch no sólo sugiere que el enfrentamiento sucedió de verdad, si no que confirma que sobrevivió a él. En dicha serie, Bane lleva una placa metálica justo en el lugar donde recibió el disparo. Años más tarde, el séptimo episodio de The Book of Boba Fett nos brindó, al fin, el deseado cara a cara entre ambos cazarrecompensas en acción real.

Yoda y los Wookiees

The Clone Wars tenía planes de explorar el significado de la mítica frase «Buena relación con los Wookiees, yo tengo», citada por Yoda en La venganza de los Sith. Y es que en este arco el Gran Maestro viajaba a Kashyyyk para ayudar a los nativos a defender su mundo de las fuerzas combinadas de los Trandoshanos y la CSI.

Boceto de los Espíritus de los árboles gigantes hecho por Dave Filoni.

Estos capítulos iban a profundizar mucho en la cultura de los Wookiees, a quienes veríamos montando sobre unos enormes mamíferos a los cuales Filoni se refiere como «Espíritus de los árboles gigantes». Estas criaturas eran una suerte de dioses para ellos, y no les gustaba invocarlos innecesariamente para la batalla. Pese a sus esfuerzos, los nativos se veían obligados a quemar parte de sus bosques para expulsar a su enemigo. Una decisión difícil dada la importancia que tienen los árboles para ellos.

Echo y Hunter en Kashyyyk.

La Fuerza Clon 99 regresaba en estos episodios, ya con Echo entre sus filas, y en un clip mostrado en la Celebration de 2015 los podemos ver ayudando a los Wookiees a combatir a los kinrath, unas temibles arañas originales del KOTOR. Por su parte, los otros clones llevaban una armadura estilizada con el rostro de Yoda, de forma similar a la 332ª de Ahsoka en el arco del Asedio de Mandalore. Por cierto, también regresaba Chewbacca.

Chewbacca, Yoda y un soldado clon.

Gran parte de los diseños e ideas creadas para este arco fueron recuperadas para el 2×06 de The Bad Batch. Además, en dicho episodio Wrecker menciona que la Fuerza Clon 99 ya había estado previamente en Kashyyyk, sugiriendo que los eventos narrados en este arco sucedieron pese a su cancelación.

Rex y R2-D2

Los clones y los droides eran los protagonistas de un nuevo arco inspirado en Top Gun, donde estallaba un conflicto de egos entre soldados de tierra y pilotos clon. Por su parte, R2-D2, quien no puede evitar meterse en líos, acababa peleándose con otro astromecánico perteneciente a un piloto. Como resultado, R2 y Rex acababan implicados en una persecución con su propietario. Sin embargo, dado que el Capitán de la 501ª no es un piloto experto, acababa estrellando su ARC-170 en una de las lunas de Ryloth. Allí, ambos debían trabajar juntos para sobrevivir.

El enfrentamiento entre clones y la persecución ilustrados por Filoni.

Regreso a Mon Cala

Poco se sabe de este arco. Al parecer, Padmé y Anakin regresaban a Mon Cala para visitar una ciudad acuática de los Quarren, donde esperaban reunirse con el antiguo senador Tikkes, miembro del Consejo Separatista.

La ciudad Quarren.

Yuuzhan Vong

Habéis leído bien, los Yuuzhan Vong iban a aparecer en The Clone Wars. Este arco tenía un aire del estilo de Expediente X, y en él una de sus naves de exploración se adentraba en la galaxia conocida en pos de juzgar las fuerzas de los Jedi y la República como preludio a su futura invasión. De hecho, llegaban a abducir a un Caballero Jedi.

Los Yuuzhan Vong en la serie de cómicas «Star Wars: Invasion».

Los Yuuzhan Vong son unos alienígenas extragalácticos que fueron introducidos en la serie de novelas de la Nueva Orden Jedi, la cual empezó con Vector Prime en 1999. Destacaban por ser una especie nómada y guerrera, y tras haber arrasado su galaxia materna, en el 25 DBY lanzaron una invasión a gran escala que puso en jaque a la galaxia. Trillones de seres murieron o fueron esclavizados en ella, y miles de planetas, como el propio Coruscant, fueron conquistados y terraformados.

Boceto de los Yuuzhan Vong y la nave de exploración en el arco cancelado.

Por lo que muestran sus bocetos presentados en la Celebration de 2015, su diseño iba a ser bastante similar al del Universo Expandido. Presentaban un cuerpo lleno de cicatrices y mutilaciones debido a su culto al dolor. Odiaban cualquier tipo de tecnología mecánica, motivo por el cual todos sus recursos, incluidas sus naves, eran formas de vida orgánica. Sin embargo, según reveló Pablo Hidalgo en su cuenta de Twitter, no iban a conservar uno de sus rasgos más característicos, y es que los Yuuzhan Vong no tenían presencia en la Fuerza al haber sido rechazados por ella.

Ahsoka en el nivel 1313

Según reveló Filoni en el panel Ahsoka’s Untold Tales de la Star Wars Celebration de 2016, la ex-Padawan de el elegido iba a protagonizar 3 de los arcos cancelados. El primero de ellos fue rescatado en la séptima temporada de The Clone Wars con las hermanas Martez como coprotagonistas. Sin embargo, el esquema inicial no contaba con ellas, y su lugar era sustituido por el de un joven contrabandista llamado Nyx Okami, con quien Ahsoka llegaba a mantener una relación muy cercana.

Nyx Okami en un clip revelado en la Star Wars Celebration de 2015.

En esencia el arco era muy similar. Mostraba a Ahsoka lidiando con las consecuencias de su decisión de abandonar la orden, conociendo la vida fuera del templo y la perspectiva de que los ciudadanos tenían de los Jedi. Empezaba ayudando a Okami como mecánica, pero pronto ambos acababan metidos problemas con varios sindicatos criminales debido a los negocios ilícitos del contrabandista.

Ahsoka y el Templo Sith

El segundo de los arcos de Ahsoka iba a mostrar uno de los secretos más oscuros de los Jedi, y es que la orden construyó su templo sobre una antigua capilla Sith como símbolo de su victoria en una batalla ocurrida 5.000 años atrás. En concreto, se encontraba en el nivel 1 bajo el Templo Jedi, el más profundo posible.

Pese a haber dejado la orden, Ahsoka no podía negar quien es y se convertía en una suerte de vigilante de los bajos fondos, ayudando a gente que lo necesita. Sin embargo, las circunstancias la iban a traer de vuelta a la superficie. La Togruta percibía que algo malvado se estaba fraguando en los bajos fondos y acudía a Anakin y Obi-Wan.

Boceto de la capilla Sith mostrado por FIloni en 2015.

Los tres se embarcaban en la búsqueda de Yoda, quien de alguna forma había sido capturado y retenido en la capilla Sith, la cual estaba custodiada por unas criaturas llamadas Kaiju. Eventualmente, el propio Darth Sidious también intentaba acceder, a través del santuario, a la cámara de los holocrones del Templo Jedi, donde sería interceptado por la ex-Padawan. Sin embargo, ambos nunca cruzaban sus miradas al estar separados por una puerta.

La existencia de la capilla Sith bajo el Templo Jedi es canon y apareció por primera vez en la novela Tarkin, publicada en noviembre de 2014. Según se relata en ella, los Sith del linaje de Darth Bane la descubrieron en los siglos anteriores al Alzamiento del Imperio y mantuvieron su existencia en secreto, dejando que su poder debilitase a sus enemigos de la superficie mientras ellos derrocaban la República desde dentro. Cuando Sidious se convirtió en Emperador, la convirtió en su guarida personal.

Ahsoka trataba de cerrar la bóveda empalando un sable de luz y en respuesta Sidious lanzaba rayos desde el otro lado de la puerta.

La capilla volvió a aparecer en la novela The High Republic: en la oscuridad, y en ella se revela que los Jedi también conocían de su existencia. La llamaban el Santuario de las profundidades. Permanecía sellada la mayor parte del tiempo, y estaba cubierta por una zona de meditación. Sólo acudían a ella cuando encontraban reliquias u objetos impregnados con el lado oscuro, los cuales llevaban allí para realizar rituales de purificación.

El Asedio de Mandalore

Tal y como acabo sucediendo en la séptima temporada, el Asedio de Mandalore estaba planeado como último arco de la serie. Sus cuatro episodios transcurren a la par de La venganza de los Sith y nos muestran donde estaban Rex y Ahsoka durante los eventos de la misma.

Ahsoka, Anakin y la 332ª en «The Clone Wars».

Ahsoka es una ciudadana. Vuelve a colaborar con los Jedi porque siente que es lo correcto. Quiere ayudar en tiempos en tiempos de crisis y confía en Anakin y Obi-Wan, aunque no está de acuerdo con sus asuntos políticos. Por ese motivo, cuando Bo-Katan acude a ella tras conocer la posición de Maul, la Togruta contacta con su antiguo maestro. Es durante los preparativos de esta misión cuando estalla la Batalla de Coruscant y lo verá por última vez hasta su reencuentro en Malachor 16 años después. Por suerte, Ahsoka consiguió el favor de los Jedi y partió hacia Mandalore para capturar, con éxito, a Maul. Sin embargo, poco después se ejecutaría la Orden 66.

Existen varias diferencias entre los bocetos iniciales de Dave Filoni y lo que vimos finalmente en pantalla en 2020. Antes de The Clone Wars ya tuvimos varias menciones a los eventos de este arco por parte de Ahsoka y Rex en Rebels. Además, en 2016 se publicaría Ahsoka, una novela escrita por E.K Johnson, quien trabajó estrechamente con Filoni y Pablo Hidalgo, cuyos primeros capítulos pasan también de puntillas por estos eventos.

Ahsoka, Rex y Bo-Katan en los bocetos presentados en 2016.

Tanto en la novela como en los bocetos iniciales Ahsoka conserva las hojas verdes originales de sus sables de luz, mientras que en la serie estas son azules. El duelo con Maul era mucho menos espectacular en la novela; transcurría íntegramente en el salón del trono del Palacio Real de Sundari y Maul acababa atrapado en unos escudos de rayos.

La Orden 66 muestra 3 versiones distintas. En la novela sucedía íntegramente en Mandalore. No se detalla demasiado lo ocurrido más allá de que Ahsoka liberó a Maul en pos de salvar a Rex. Finalmente, ambos cavaban una sola tumba falsa, donde supuestamente estaba enterrado Rex, y Ahsoka dejaba en ella sus dos sables de luz. En The Clone Wars sucede durante su viaje a Coruscant a bordo del Tribunal y, tras estrellarse en una luna desconocida, la Togruta y el clon enterraron a decenas de sus camaradas.

Por si aún no lo sabíais, el lobo es el animal favorito de Filoni.

Los bocetos presentados en la Celebration de 2016 sugieren que la Orden 66 sucedía en tierra, aunque probablemente en un planeta distinto a Mandalore. En un homenaje a La Princesa Mononoke, Ahsoka huía a un bosque a lomos de un lobo. Posteriormente era rodeada por los clones en un claro, pero acudía toda una manada a salvarla. Filoni recuperó esta idea en la cuarta temporada de Rebels, en cuyo penúltimo capítulo varios lobos de Lothal liberan el campamento de los Espectros del asedio de las tropas imperiales.

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