Entre todo el contenido de Star Wars que está saliendo se encuentra la Alta República. Esta nueva era que, en forma de libros y cómics, cuenta, en mi humilde opinión, algunas de las mejores historias de los últimos años de Star Wars y ya se ha convertido en mi época favorita.
La Alta República ocurre aproximadamente 250 años antes de las precuelas. Una época de prosperidad y expansión para una República sin guerra que brilla por su unidad. Las historias están escritas por Charles Soule, Claudia Gray, Cavan Scott, Justina Ireland y Daniel José Older. Juntos consiguen mantener la esencia de Star Wars a la vez que traer cosas muy interesantes y nuevas manteniendo una cohesión que hace que todo fluya.
Hablemos, sin embargo, de los protagonistas, los Jedi. En la Alta República se nos presenta una Orden Jedi algo más joven y considerablemente menos dogmática y estricta, y eso se refleja en los propios Jedi y sus actitudes. En esta época no faltan las muestras de amistad, cariño y complicidad entre ellos aún manteniendo la norma de nada de apegos o relaciones amorosas (aunque algunos se la salten a la torera). También se les ve varias veces hablar entre ellos de sus dudas con la Orden o de sentimientos como la tristeza o inseguridad, por ejemplo.
Además, los Jedi que protagonizan estas historias son muy diversos. Hay humanos, pero también hay Twi’leks, Togrutas, un Trandoshano y hasta un Wookiee. De edades, personalidades y mentalidades muy distintas que ofrecen puntos de vista muy diversos de la fuerza, la Orden y de lo que significa ser Jedi.
¿Pero, qué sería una historia sin sus antagonistas? Hablemos primero de los Nihil que en esencia son vikingos espaciales divididos en facciones, o tempests como las llaman ellos, muy distintas entre ellas y con un objetivo común: hacerse ricos sin importar los medios. No tardan, por lo tanto, en estropear todos los planes que la Canciller tiene para la República. Su líder, el Ojo, tiene además en su lista de objetivos acabar con la Orden Jedi, convirtiéndoles en una amenaza muy peligrosa. ¿Lo más interesante de ellos? Que pueden usar el hiperespacio de formas que nadie más puede o podrá.
Los otros antagonistas son los Drengir: unas plantas ancestrales, inteligentes y carnívoras que buscan la dominación de la galaxia. Pero no hay que subestimarles por ser unas simples plantas ya que son extremadamente peligrosas y difíciles de matar.
Todo esto hace que la Alta República sea una era de lo más interesante, llena de momentos felices y entrañables balanceados por otros increíblemente tristes que solo hacen que quieras seguir leyendo. De momento está en la primera de sus tres fases por lo que cabe decir que la Alta República es el futuro de Star Wars y para ser parte de él todo empieza por Light of the Jedi de Charles Soule.