¿Aún dudas en si comprar o no el juego? Quizás este artículo te ayude a decidirte.
Star Wars: Outlaws vio la luz el 30 de agosto de este mismo año 2024, y los jugadores se han deshecho en elogios ante el gran abanico de virtudes que la entrega ha traído consigo. Muchos curiosos aún se encuentran dubitativos acerca de si el juego merece o no la pena, y es que la publicidad que se ha movido en torno al mismo en lo que a sus ventas se refiere, no ha sido la mejor.
Este artículo está libre de spoilers de la historia principal del juego.
En este artículo hablaré de las particularidades del juego, lo que le hace ser lo que es y una pequeña opinión personal acerca del mismo.
Igualmente seremos francos: El juego ha vendido más de un millón de copias en su primer mes. Estos números para cualquier entrega son grandes números, pero Ubisoft parecía esperar un número mucho mayor tratándose de una franquicia como lo es Star Wars, y el descontento es palpable. Pese a ello, no consideran ni de lejos que el juego haya sido un fracaso. Más bien todo lo contrario.
Muchos jugadores que apostaban bastante flojo por el juego, han rectificado y reconocido que tiene esa esencia que caracteriza al Star Wars de la vieja escuela. Y las calificaciones distan mucho de ser bajas o mediocres. Esta oleada de positivismo y agradecimiento por parte del fandom no ha pasado inadvertida para el director creativo del juego, Julian Gerighty, quién ha asegurado que seguirán invirtiendo cariño, dinero y esfuerzo en el juego para hacer de él un juego aún mejor.
Echando la mirada atrás, juegos como Star Wars Jedi: Fallen Order consiguieron a la larga más de 20 millones de jugadores en un margen de dos años. Así que nos queda esperar para confirmar si las cifras mejorarán con el paso de los meses y la adición de contenido o si se estanca.
Kay Vess y Nix
La protagonista de nuestra historia es una chica llamada Kay. Nacida en el planeta de Cantonica, en el barrio obrero de Canto Bight.
Ladrona, forajida, pilla… Su historia es la de una joven que ha tenido que buscarse la vida al haber nacido en un ambiente donde predomina la pobreza. Antaño vivía con su madre, una mujer que hizo flaco favor a la educación adecuada que debería recibir una niña. Kay aprendió a esconderse, escalar y hackear, para sobrevivir a base de robos y engaños. Aunque desde el principio veremos que le falta mucho recorrido como para ser una profesional en lo suyo.
Al comienzo de nuestra historia, Kay se mueve por los callejones con su amigo inseparable, Nix. Una mascota que será indispensable en su aventura. Esta mascota, hará las funciones que harían otros personajes en un videojuego en el que el protagonista fuera un Jedi. En videojuegos como Star Wars Jedi: Fallen Order, Cal usa la Fuerza para atraer objetos, empujar palancas, o mover según qué elementos.
En Star Wars: Outlaws tenemos a Nix para todo ello.
El diseño estético de Kay es uno sencillo pero funcional.
Viste chaquetillas, al más puro estilo de un sinvergüenza, y peina un moño en su cabeza con un pincho de datos.
Cada prenda cumple una función determinada, que dará atributos para unas habilidades u otras, a gusto del jugador. Pero no es algo que sea un problema, ya que podéis cambiar la apariencia de ciertos atuendos para vestir como os guste, respetando los stats que preferís para el personaje.
Planetas y lunas: Recorriendo la galaxia
Movernos por las calles de Canto Bight es un regalo audiovisual para los fans, pero lo que viene después de esa primera parte no se queda atrás.
Además de poder hacer misiones a nivel espacial, podremos visitar lugares como Toshara, Kijimi, Akiva y Tatooine.
De entre los mencionados, Toshara es la única localización creada únicamente para el juego. Una luna ventosa, con una orografía agreste y unas rocas de lava que evocan un ambiente bastante alienígena.
Kijimi fue un añadido de la mano del Episodio IX: El Ascenso de Skywalker. Una localización al puro estilo de las calles empedradas de Nepal.
Akiva también ha sido mencionado con anterioridad, como fue en el caso de El Renacer de la Resistencia. En este libro, protagonizado por Poe Dameron, la Resistencia buscaba una localización para una nueva base, tras los sucesos del Episodio VIII. Antes de llegar a Ajan Kloss, Akiva fue una de las opciones visitadas por los remanentes de la organización.
Akiva se presenta como un ambiente selvático, impregnado por la humedad y por las callejuelas llenas de mercaderes, con una pincelada que se asemeja tímidamente a las calles del puesto de avanzada Black Spire.
Tatooine, pese a no ser el planeta creado para el juego, es indudablemente la joya de la corona.
Podéis visitar todos los lugares emblemáticos de las películas originales y os sentiréis literalmente en casa. Desde la granja de los Lars, hasta la cantina de Chalmun. Está cuidado al detalle, y costará que no os perdáis entre sus callejones y casas.
Sindicatos criminales y su reputación
A medida que avancemos en nuestra aventura, nos veremos en muchas encrucijadas en las que tendremos que decidir a qué sindicato apoyamos, y a cual fastidiamos.
En muchas ocasiones, ayudar a unos personajes o ciudadanos, puede enturbiar nuestra relación con un grupo. Subir o disminuir nuestra reputación con los distintos señores del crimen puede ser beneficioso o más bien fastidioso.
Y aunque existe la posibilidad de llegar a un equilibrio y buena reputación con todos, la verdadera experiencia del juego reside en ser fiel a nuestras preferencias y ser consecuentes con nuestra acciones.
Por ejemplo:
Si estamos en Tatooine y escuchamos información valiosa para los Pyke, podemos venderla a los Hutt. Si lo hacemos, los Hutt nos tendrán en consideración y subiremos reputación con ellos, lo que nos permitirá entrar a placer en sus territorios (cuando tengamos la reputación muy alta) e incluso comprar mercancía a sus mercaderes por un precio inferior.
Pero al hacerlo, nuestra reputación con los Pyke mermará. Si baja lo suficiente hasta llegar a ser muy mala, sus vendedores tendrán prohibido venderte mercancía y lo que es peor: Si los enfadas demasiado, pondrán precio a tu cabeza.
Si has fastidiado mucho al sindicato equivocado, puedes toparte con cazarrecompensas que aparezcan en mitad de una misión y te la fastidien con un tiroteo.
¿Cuáles son los sindicatos criminales que encontramos en el juego?
El Clan Ashiga: Una especie insectoide que denomina a su propia organización como “El Enjambre”. Liderados por una reina, han comenzado a expandirse más allá de sus fronteras, lanzándose hacia los confines de la galaxia.
Los Hutt: Liderados por Jabba el Hutt, operan desde Tatooine, desde su famoso palacio. Tienen espías y matones por todas partes de la galaxia. Y aunque parece la opción menos elegante, Jabba sigue siendo uno de los líderes más crueles y temidos.
Crimson Dawn: Con Lady Qi’ra al frente (Solo: A Star Wars Story), el Crimson Dawn tiene oídos en todas partes. Sibilinos y silenciosos, son conscientes de que la información es poder.
Los Pyke: Contrabandistas de especia, asesinos sin miramientos y con los bolsillos cargados de créditos, los Pyke no tienen filtro ni compasión con sus enemigos. Poderosos aliados, pero peligrosísimos enemigos.
Zerek Besh: Este sindicato criminal formará parte de la historia del juego, pero no podrás hacer nada para unirte o afiliarte a ellos porque no corresponde con la historia. Su cabecilla es Sliro Barsha y operan desde Cantonica.
Historia y avances
El juego tiene una historia principal que puede durar a lo sumo unas 25 horas en dificultad moderada. Pero que esto no os desaliente: Literalmente hay cientos de horas de juego.
La partida no está pensada para que sigas la trama principal únicamente. Y si así fuera, una vez la acabes y mates el gusanillo de la curiosidad, te quedará mucho trabajo por hacer.
A lo largo y ancho de los distintos planetas y lunas, hay misiones de todo tipo y minijuegos para aburrir.
Podrás jugar al sabacc (modalidad Kessel) allá donde vayas. Podrás apostar por carreras de fathiers y hacerte de oro. Podrás jugar en máquinas de arcade dentro del propio juego (hay como 4 juegos diferentes en las máquinas que iremos encontrando). También podrás toparte con retos de carreras para tu speeder, y por supuesto, infinidad de contratos de toda índole:
Desde recoger alijos de piratas, hasta adentrarte en bases y desplumar las carteras de créditos de los estirados oficiales imperiales. Y no nos olvidemos de que, si nos cansamos de la acción, podemos visitar los mercadillos con Nix y pedir algo de comer.
También hay tesoros escondidos por todos los mapas y una magnífica holonovela que cuenta una tórrida historia de deseo y pasión de lo más estrambótica.
Después de acabar Star Wars: Outlaws me di cuenta de que mi experiencia en el juego solo acababa de empezar. Y es que tener la posibilidad de perderse en escenarios en el que el mundo está a tu disposición para vivir tu propia aventura, bajo tus propios términos… es una sensación irrepetible. El mundo sigue vivo después de la historia de Kay, y está ahí esperando a que lo desafíes.
Una de las sorpresas que me he topado jugando es la sensación de que el juego no me dirige por un pasillo sin vida. Algo que he sentido inevitablemente en entregas anteriores de juegos de la temática de Star Wars.
Aquí siento que todo es interactivo y que mis acciones tienen consecuencias a tiempo real en el entorno en el que me muevo.
Mecánicas y posibilidades
El personaje de Kay puede caminar, correr, agacharse, esconderse, saltar y usar gancho a un estilo que recuerda gratamente a la movilidad de los Uncharted.
No sólo el estilo de Kay es personalizable, sino que también lo es su bláster, como su speeder y su nave. Todo a nivel no únicamente estético, sino de mejoras de velocidad, escudos y habilidades. Kay también puede tomar armas tales como rifles o lanzagranadas en sus incursiones. Pero una vez más, el mejor apoyo es Nix.
Nix puede abrir puertas, sabotear alarmas y contenedores explosivos, accionar mecanismos, distraer objetivos e incluso, atacar objetivos. Juntos podéis realizar acciones de noquear si queréis salir sin ser vistos y sin montar un tiroteo.
También podrás hackear sistemas (y con suerte robar una buena cantidad de créditos de paso) para apagar cámaras o torretas, para abrir puertas, o para simplemente obtener información jugosa.
En el juego, tú decides si quieres entrar como un elefante en una chatarrería, o si quieres ser silencioso y pasar desapercibido para completar la misión sin bajas y sin ser visto.
Aspecto audiovisual y funcional: Un mundo vivo
Llevo décadas jugando a juegos de Star Wars de todo tipo, y puedo decir sin riesgo a equivocarme que Star Wars: Outlaws es un auténtico fenómeno de lo audiovisual. Con música acorde a localización y circunstancias, y un ciclo de día y noche imperturbable.
Cada mínimo detalle está rigurosamente cuidado allá donde pongamos un pie con nuestro personaje: Luces, edificios, asentamientos, cantinas, mercaderes…
Aunque las comparaciones son odiosas y para que se me entienda con mejor detalle, con Cal Kestis vivimos una epopeya en Star Wars Jedi: Fallen Order y Star Wars Jedi: Survivor. Una aventura épica e irrefrenable que tenía un fin apoteósico. El escenario servía al personaje, estaba diseñado para él. Aquí funciona diferente.
Con Kay Vess vivimos la cotidianidad, la rutina, el día a día. El mundo sigue funcionando sin que tú incidas en él. Y las aventuras están integradas en ese mundo. Y esto ayuda gratamente a la inmersión. Es un juego en el que, aunque hayas terminado la misión principal, sigues teniendo ganas de jugar. Ayudar o fastidiar a ciertos npcs, trabajar para tu sindicato, y descubrir mil historias más que siguen ahí, esperando ser contadas.
Opinión personal
Para todo fan de Star Wars, este juego es un must. Una joya llena de guiños, giros y entretenimiento, que hará las delicias de todo fan del submundo criminal. He disfrutado muchísimo de la historia principal y de los compañeros que te topas por el camino, pero para mí el punto fuerte ha sido dejar todo eso a un lado y centrarme en trabajar para los sindicatos del crimen.
El juego tiene todas las papeletas de ser uno al que fácilmente se le podrían añadir nuevos planetas y misiones. Y si bien las aventuras de a pie me han gustado, las de la nave no han atraído mucho mi atención.
Personalmente, creo que Star Wars: Outlaws conseguiría una base importante de jugadores si facilitase la posibilidad de servidores y un mundo abierto, tal y como hizo Red Dead Redemption II en su día. La posibilidad de personalizar un personaje y poder hacer encargos o ser perseguido por el Imperio u otros jugadores, enriquecería muchísimo al juego.
Permitíos conocer la historia de Kay, lejos de los Jedi, los Sith, la Rebelión o los héroes de renombre de la galaxia. Y sobretodo recordad, es recomendable no deberle dinero a Jabba.
Que la Fuerza os acompañe.