Obi-Wan Kenobi entra en su segunda mitad con el cuarto capítulo de los 6 que tendrá la serie limitada y, como ya viene siendo habitual, arranca en el mismo punto en el cual dejamos al Maestro Jedi la semana pasada. Sin duda alguna, muchos de los guiños que nos ha dejado la Parte IV han hecho las delicias de los espectadores que jugaron al videojuego Star Wars Jedi: Fallen Order.
¡Alerta Spoilers!
La base de los cazadores
La Fortaleza de la Inquisición tiene bastante más protagonismo que en los capítulos anteriores. Tal y como mencionan los miembros de La Senda, esta base también es un centro de adiestramiento. En el Star Wars Jedi: Fallen Order, vimos que tanto los inquisidores como los soldados de la purga disponían de arenas donde entrenar el combate cuerpo a cuerpo.
Estas mismas unidades especiales aparecen posteriormente acompañando a Reva junto a los soldados de asalto. En Obi-Wan Kenobi, presentan un diseño distinto respecto a su versión del Jedi Fallen Order o la de su primera aparición, en la serie de cómics Darth Vader (2017). Especializados en la caza de Jedi, su alto nivel de entrenamiento les permite manejar varios tipos de armas, desde los rifles DC-15A de los soldados clon hasta electrovaras para el combate cuerpo a cuerpo. Sin embargo, al igual que los soldados de asalto, en el capítulo empuñan el clásico rifle blaster E-11.
Obi-Wan se cuela en la base de la misma forma que Cal Kestis y Cere Junda en Jedi Fallen Order, nadando bajo la superficie. Como Cal, Kenobi circula por los pasillos del perímetro defensivo de la fortaleza para abrirse paso hasta el bloque prisión. Una vez allí, debe evadir a los soldados de asalto y a los droides buscadores. Estos últimos pertenecen a un tipo de droide buscador ID, probablemente un modelo anterior al ID10 utilizado por los miembros del Escuadrón Infernal en la campaña del Battlefront II. En el hangar también aparecen los clásicos droides ratón.
Por su parte, Tala intenta infiltrarse en la fortaleza usando sus derechos como capitán del ejército. En un primer momento es retenida por un oficial que afirma ser el jefe de seguridad de ese nivel, y por su placa sabemos que ostenta el rango de teniente. Posteriormente usa su cilindro de códigos para entrar en los sistemas de la fortaleza. Estos dispositivos almacenan todo tipo de información codificada y garantizan el acceso a distintos niveles de seguridad según el rango del oficial. Así pues, son exclusivos de cada individuo.
Víctimas de la Purga
Obi-Wan accede al bloque prisión, donde se encuentra con un cementerio de antiguos Jedi y enemigos del Imperio. A primera vista, entre los cadáveres conservados vemos a Coleman Kcaj, un Maestro Jedi Ongree que formó parte del Consejo Jedi en los últimos días de las Guerras Clon. La supervivencia inicial de Kcaj a la Orden 66 fue confirmada en el cómic Darth Vader (2017) #19. Sin embargo, parece que acabó siendo cazado después del 14 ABY, momento en el que tiene lugar dicho número. Lo mismo ocurre con Oppo Rancisis, otro superviviente confirmado en el mismo lugar. El maestro Thisspiasiano formó parte del consejo desde la era de la Alta República hasta los últimos días de la orden. Si prestamos atención, podemos intuir su cadáver conservado en el segundo piso.
El primer Jedi en el que se fija Obi-Wan es ni más ni menos que Tera Sinube, un Maestro Jedi Cosiano a quien ya conocimos en varios capítulos de The Clone Wars. Sinube formó parte del consejo hasta poco antes de la Batalla de Naboo y era un investigador era un experto en los bajos fondos de Coruscant. Tras retirarse se dedicó a investigar en los archivos Jedi y a dar clase a los iniciados. Y hablando de los niños, el iniciado Jedi que aparece muerto es uno de los younglings del flashback del primer capítulo tal y como confirman los créditos. Aparentemente no sería el único, pues aunque no lo vemos a simple vista, entre los cuerpos se encontraría otro de los ellos. Estos dos jóvenes están interpretados por Jonathan y Oliver Ho.
Probablemente entre los cuerpos presentes en el bloque prisión también se encuentre el de la mujer de Roken, el personaje interpretado por O’Shea Jackson que actúa como uno de los líderes de La Senda. En sus diálogos nos dejan entrever que se casó con una Jedi superviviente a la Orden 66, quien acabó siendo encontrada por los inquisidores. Roken ya era consciente de la condición de su mujer antes de casarse con ella. Puede que ambos se enamorasen mientras formaba parte de una milicia planetaria durante las Guerras Clon. Esto explicaría el hecho de que de dirija a Kenobi por el título de general, el cual recibieron todos los caballeros y maestros Jedi durante la guerra.
Descifrando la senda
Reva emplea el poder de sondar la mente para sacarle información a Leia acerca de La Senda. Sin embargo, al contrario que con Haja en el segundo capítulo, esta vez no tiene éxito. Esta habilidad telepática es bastante recurrente a lo largo de la saga. Por ejemplo, Kylo Ren la usa para sacarle información a Rey en El despertar de la Fuerza y Maul y los Jedi lo usan en varias ocasiones en The Clone Wars.
Con su paciencia agotada, Reva lleva a la princesa a una de las cámaras de interrogatorios de la fortaleza. Se trata de una sala de tortura donde a menudo eran llevados los Jedi y portadores de la Fuerza capturados con el objetivo de intimidarles, quebrantar su voluntad, y convertirlos en inquisidores. Cere Junda y Trilla Suduri fueron algunas de los Jedi llevados a allí.
Según menciona la Tercera Hermana, el Imperio ya tenía conocimiento acerca de la Senda. Al parecer, descubrieron que uno de los lugares en los que opera es Balnab. Se trata de un planeta del Borde Medio que hizo su primera aparición en The Clone Wars, en un capítulo protagonizado por R2-D2 y C-3PO. Estaba poblado por los Balnab, quienes veneraban a una especie de dios holográfico que realmente estaba controlado por droides de la serie DUM. Más tarde, cuando Tala se enfrenta a Reva para distraerla, la traidora afirma que su base se encuentra en Florrum. Este planeta desértico del Borde Exterior también se dio a conocer en la misma serie. Durante las Guerras Clon albergó la base de la banda de piratas Weequay de Hondo Ohnaka.
Ya para terminar, la célula de Jabiim dispone de aerodeslizadores T-47 en su inventario. Estos vehículos son los mismos que usaron los rebeldes en Hoth durante El Imperio contraataca.
¡Hilo! Obi-Wan Kenobi episodio III
ATENCIÓN SPOILERS
¡Descubre todos los guiños y curiosidades del 4º capítulo de #ObiWanKenobi!
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— WookieeNews #StarWars (@WookieeNews) June 8, 2022