Tras el sorprendente final de la semana pasada, el nuevo episodio de Ahsoka nos trae otro épico cierre que hace volar nuestras expectativas para la próxima parte. En La Guerrera de las Sombras disfrutamos de una visión retrospectiva de nuestra togruta favorita que jamás imaginamos que llegaría. Todo ello con referencias que algunas requieren de análisis e incluso un poco de especulación. Y como siempre, nos os olvidéis de repasar la guía del último episodio.
¡Alerta Spoilers!
Perdidas en acción
El dúo de maestra y aprendiz compuesto por Ahsoka Tano y Sabine Wren aparentemente desaparecieron sin dejar rastro en Seatos. La general Hera Syndulla debe proceder a encontrarlas lo antes posible. Para ello cuenta con la inestimable ayuda de su hijo Chopper, su fiel droide Chopper y los pilotos de Ala-X que la acompañan encabezados por el capitán Carson Teva. Además de emplear los sensores del astromecánico y las naves, Hera usa en el círculo de piedras un escáner de propósito general EnhanceScan, fabricado por CryonCorp. Se trata del mismo modelo de sensor portatil que utilizó Han Solo en Episodio V – El Imperio Contraataca para buscar a un desaparecido Luke Skywalker en la helada superficie del planeta Hoth.
Sin embargo la clave para hallar a la desparecida jedi será la conexión natural que posee el joven Jacen Syndulla con la Fuerza. Tal y como se estableció desde los inicios de Star Wars, es más probable que los vástagos de usuarios de la Fuerza hereden esa habilidad. Siendo hijo del caballero jedi Kanan Jarrus, cuyo tema musical se puede escuchar durante el episodio, Jacen no iba a ser una excepción. Tras el rescate de Ahsoka, ella misma utilizará la habilidad de la psicometría o eco de la Fuerza para averiguar que ocurrió con Sabine. Como ya hizo en la Parte Uno, esta habilidad permite obtener información sobre personas o eventos asociados con un objeto o un lugar únicamente tocándolo o ingresando en él.
Y para alcanzar a Sabine y sus captores, Ahsoka recurre al vínculo animal, una técnica de la Fuerza que permite conectar con la mente de los animales. De hecho, en el primer corto de Tales of the Jedi, que relata sus orígenes en su mundo natal de Shili, se desvela que fue el primer poder de la Fuerza que alguna vez usó, cuando lo empleó para domar a una bestia felina conocida como raxshir o dientes de sable. En este episodio, lo usa con los purrgil, tal y como hizo Ezra en el episodio final de Rebels. Dichas criaturas son capaces de viajar por el hiperespacio debido a que respiran un gas llamado clouzon-36, el cual transforman en coaxium, un hipercombustible que las naves suelen usar en sus hiperpropulsores.
Cadena de mando
Carson Teva revela que la senadora Organa es quien está cubriendo la ausencia injustificada de Hera ante el mando de la flota. Pese a que su mundo natal y capital de sector fue destruida 10 años antes, Leia representa al Sector Alderaan en el senado de la Nueva República. Hera y Leia se conocieron durante la segunda temporada de Rebels, cuando servía como ayudante de su padre en el senado. Por aquel entonces realizó una visita diplomática a Lothal cuyo propósito real era entregarle tres corvetas cabeza de martillo a los rebeldes. Las dos trabajaron de forma más estrecha durante la Guerra Civil Galáctica. Ambas se convirtieron en generales de la Alianza para Restaurar la República y, como se puede ver en las series de cómics Star Wars (2015) y Star Wars (2020), solían coincidir en las reuniones del Alto Mando de la Alianza.
Cuando la flota de la Nueva República llega a Seatos, Carson Teva la recibe para darle tiempo a Ahsoka de llevar a cabo su plan. El piloto menciona que está destinado en el planeta Adelphi, el mundo el cual alberga la base de la Nueva República que conocimos en la tercera temporada de The Mandalorian. Interactúa con la capitán Girard, quien cuenta con el apoyo de un oficial ishi tib, especie que apareció por primera vez El Retorno del Jedi.
Una última lección
En cuanto a la experiencia astral que vive Ahsoka, nos quedamos con más preguntas que respuestas. Ni siquiera podemos saber que es exactamente el Anakin Skywalker que aparece. Bien podría ser él mismo manifestándose como espíritu de la Fuerza en el Mundo entre Mundos, una visión creada por la misma Fuerza o incluso el mismo recuerdo que Ahsoka tiene de su maestro en su subconsciente evocado a su vez por el Mundo entre Mundos. Lo cierto es que todo se asemejó mucho a la prueba que Luke Skywalker enfrentó en la Caverna del Mal en Dagobah o Rey en la Cueva del Espejo en la Isla del Templo de Ahch-To, ambos lugares fuertemente conectados con el lado oscuro de la Fuerza. Los que entraran en ellos se someten al control de la vergencia, proyectando sus peores miedos como apariciones e ilusiones.
Cuando en un primer momento Ahsoka se niega a pelear contra él, Anakin afirma haber oído eso mismo con anterioridad. En concreto lo pudo escuchar de boca de Luke Skywalker, su propio hijo, durante su duelo en la Segunda Estrella de la Muerte. En cuanto a la primera visión de las Guerras Clon, la atmosfera y la superficie rojiza sugieren que se trata de la Batalla de Teth, la cual vimos en la película de The Clone Wars, donde se introdujo a la togruta. En ella podemos ver a maestro y aprendiz acompañados por los soldados clon de la Legión 501ª, quienes lucen la armadura de fase I y van armados con sus típicos rifles blásters DC-15A y carabinas bláster DC-15A, ambos fabricados por Industrias BlasTech.
La segunda visión es la de la Batalla de Ryloth, tal y como evidencia el hecho de que las fuerzas de la República cuenten con el apoyo de soldados de la Resistencia Twi’lek, quienes portan rifles bláster A280, los mismo que usaban los rebeldes durante la Batalla de Hoth, También es una de las primeras batallas en las que Anakin y Ahsoka lucharon juntos. Concretamente en la primera temporada de The Clone Wars vimos que en principio ellos dos se encargaron solo de la batalla espacial, mientras que los maestros jedi Obi-Wan Kenobi y Mace Windu aterrizaron en la superficie con el ejército clon para liberar el planeta de la ocupación separatista. Pero en un juego que salió justo un año después, The Clone Wars – Republic Heroes, ampliaron esa batalla haciendo que ambos jedi junto con la Legión 501ª y el capitán Rex se encargaran de los últimos reductos del ejército droide en Ryloth, pues los otros generales jedi se habían retirado.
La visión del Asedio de Mandalore tiene poco que comentar, se ajusta perfectamente a todo lo que vimos en el arco final de la última temporada de la serie. Tras reunirse con Anakin por última vez, Ahsoka viajaba como asesora de la recién creada 332ª Compañía, cuyos clones personalizaron sus cascos con las marcas faciales de la togruta. Su misión apoyar a la Resistencia Mandaloriana, liderada por Bo-Katan, y liberar el planeta del yugo de Maul y sus supercomandos, quienes decoran sus cascos con cuernos que sirven como homenaje hacia su líder.
Y como un detalle interesante es como durante las visiones el maestro de Ahsoka va fluctuando entre sus dos fácetas, como el caballero jedi Anakin Skywalker y como el lord sith Darth Vader. Para ello, a parte de las secuencias en las que cambia de una apariencia a otra, también emplean el cambios de color en la espada láser y en la mirada de Anakin como le ocurre en Episodio III – La Venganza de los Sith. Esto consiste en cuando un usuario de la Fuerza cae al lado oscuro de la Fuerza, por alguna razón sus ojos suelen volverse de color amarillo. Todo esto simboliza tanto el miedo que tiene la togruta a convertirse en su maestro como la culpa que siente por no poder evitar el destino que corrió. Cuando lo vence y decide no matarlo, supera ese miedo. Como su maestro le enseña, el legado de ambos es mucho más que eso.
¡Hilo! ‘Ahsoka’ #1×05
⚠️ ATENCIÓN SPOILERS ⚠️
¡Conoce todas las curiosidades y guiños del 5º episodio de #Ahsoka!
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— WookieeNews (@WookieeNews) September 14, 2023